¿Quieres quedarte embarazada? Atenta a estos 8 mitos sobre la fertilidad

Depende del estrés. Se ha demostrado que el trabajo por turnos y los deportes de competición tienen un efecto negativo en el ciclo. El estrés emocional, en cambio, no, según los expertos. Lo que sí es cierto es que el estrés y la presión no son saludables a largo plazo y deben evitarse.

Es cierto. Los expertos en fertilidad recomiendan que las mujeres que quieran tener hijos no consuman más de 200 mg de cafeína al día. Esto equivale a dos tazas de café o té negro.

Esto también se aplica a las parejas: un estudio demostró que los hombres que se abstienen de tomar café en la medida de lo posible tienen más posibilidades de ser padres.

No hay ninguna evidencia que pruebe esto. La gravedad no juega ningún papel en la fecundación.

Esto no es cierto. En un día, los espermatozoides se recuperan y vuelven a su calidad y velocidad iniciales. Sin embargo, si mantienes relaciones sexuales varias veces al día, es posible que se aflojen.

Esta afirmación puede parecer un cuento de hadas, pero el jarabe para la tos puede ser realmente un apoyo si quieres tener hijos. El jarabe expectorante para la tos afloja el moco cervical, haciéndolo más receptivo al esperma.

Durante gran parte del tiempo, el moco cervical impide que los gérmenes y, por tanto, los espermatozoides entren en el útero. Sin embargo, alrededor del momento de la ovulación, su consistencia y su función cambian: la secreción se vuelve ahora fluida y transparente y permite el paso de los espermatozoides. También protege a los espermatozoides del entorno vaginal ácido.

Este mito es persistente. Hay algo de verdad en ello: si aún no has tenido la regla, sólo hay un 2% de probabilidades de concebir y el embarazo es casi imposible. Sin embargo, si tienes periodos regulares, puedes quedarte embarazada a pesar de la lactancia.

Esto es un error. Los espermatozoides masculinos pueden sobrevivir hasta 5 días después del coito, por lo que también es posible quedarse embarazada si has tenido relaciones sexuales unos días antes de la ovulación.

Todo es mejor cuando hace buen tiempo. Aunque parezca una locura, esto también se aplica a la fertilidad. Un estudio realizado en 2015 muestra que la fertilidad femenina aumenta en un tercio durante los periodos de sol. La teoría detrás de esto: El sol estimula la producción de melatonina y vitamina D. Esto influye positivamente en la fertilidad y mejora la calidad de los óvulos. Pero no te preocupes, incluso en invierno puedes hacer realidad tu deseo de tener un hijo.